Esta madrugada, ya agotado, he conseguido dormir un par de horas, pero la verdad es que no he conseguido el tan buscado descanso. En cambio, me he llevado un sueño/pesadilla bastante raro y perturbador, pero lo considero importante porque nunca recuerdo los sueños que tengo y este se me ha quedado grabado en la cabeza.
6:00 a.m. Al fin, despues de varias horas dando mil vueltas en la cama y después de otro ataque; aunque más leve que los últimos (gracias por hacerme reir loquilla) conseguí dormirme. La última imagen antes de dormirme fue el montón de ropa que estaba amontonado en mi silla; de hecho así es cómo comienza mi sueño:
El montón de ropa sigue ahí pero me doy cuenta que no es un montón de ropa, si no una joven pálida de pelo oscuro que está mirando por mi ventana. Es muy delgada, se le marcan todos los huesos en la cara, pero no por ello no deja de ser bella; pero es una belleza extraña, intimidante. Entonces veo cómo la jóven empieza a girarse y veo cómo su piel parece brillar, tanto que parece ser la única fuente de luz...
Entonces soy un niño de nuevo y estoy con mis padres, los cuales están obsesionados por probar un helado de la nueva heladería de moda, pero yo lo único que quiero es volver a casa. Lo primero que pienso es que es un sitio muy raro para una heladería; todo está muy oscuro y apenas se ve a la gente sentada en las mesas. El lugar parece muy lujoso, como una sala de fiestas de gángsters o algo así. Todo el mundo va de etiqueta, mientras que nosotros llevamos ropa de verano; mis padres están discutiendo con el encargado pero no escucho lo que están diciendo porque no recuerdo dónde estaba la entrada; de hecho no me acuerdo de haber entrado por ninguna puerta, simplemente aparecimos aquí.
Cada vez más nervioso, me alejo de mis padres para ver si encuentro la puerta. Termino andando por un pasillo oscuro en el que no puedo ver dónde acaba o empieza. Entonces es cuando escucho las pisadas a mi espalda. Parece como si alguien estuviera andando con unos zapatos de metal, porque sus pisadas resuenan a lo largo del pasillo. Yo cada vez más asustado me pongo a correr; las pisadas se convierten en un redoble furioso a mis espaldas. Cada vez las noto más cerca y no hay ninguna salida, sólo el pasillo, que no parece tener fin; y es cuando noto unas manos alrededor de mi cuello...
Despierto en mi habitación y ahí está el montón de ropa. Alargo la mano para encender la lámpara y no se enciende. El montón de ropa vuelve a ser la jóven de pelo oscuro y ahora me está mirando. Su piel no para de brillar y veo como su cara empieza a cambiar; es como arcilla derretida; histérico me levanto de la cama para encender la luz del cuarto pero tampoco se enciende. La jóven me agarra del cuello, pero yo me revuelvo y consigo abrir la puerta; pero al final del pasillo está esperándome y esta vez me agarra del cuello y no me puedo librar...
Entonces me despierto...
6:00 a.m. Al fin, despues de varias horas dando mil vueltas en la cama y después de otro ataque; aunque más leve que los últimos (gracias por hacerme reir loquilla) conseguí dormirme. La última imagen antes de dormirme fue el montón de ropa que estaba amontonado en mi silla; de hecho así es cómo comienza mi sueño:
El montón de ropa sigue ahí pero me doy cuenta que no es un montón de ropa, si no una joven pálida de pelo oscuro que está mirando por mi ventana. Es muy delgada, se le marcan todos los huesos en la cara, pero no por ello no deja de ser bella; pero es una belleza extraña, intimidante. Entonces veo cómo la jóven empieza a girarse y veo cómo su piel parece brillar, tanto que parece ser la única fuente de luz...
Entonces soy un niño de nuevo y estoy con mis padres, los cuales están obsesionados por probar un helado de la nueva heladería de moda, pero yo lo único que quiero es volver a casa. Lo primero que pienso es que es un sitio muy raro para una heladería; todo está muy oscuro y apenas se ve a la gente sentada en las mesas. El lugar parece muy lujoso, como una sala de fiestas de gángsters o algo así. Todo el mundo va de etiqueta, mientras que nosotros llevamos ropa de verano; mis padres están discutiendo con el encargado pero no escucho lo que están diciendo porque no recuerdo dónde estaba la entrada; de hecho no me acuerdo de haber entrado por ninguna puerta, simplemente aparecimos aquí.
Cada vez más nervioso, me alejo de mis padres para ver si encuentro la puerta. Termino andando por un pasillo oscuro en el que no puedo ver dónde acaba o empieza. Entonces es cuando escucho las pisadas a mi espalda. Parece como si alguien estuviera andando con unos zapatos de metal, porque sus pisadas resuenan a lo largo del pasillo. Yo cada vez más asustado me pongo a correr; las pisadas se convierten en un redoble furioso a mis espaldas. Cada vez las noto más cerca y no hay ninguna salida, sólo el pasillo, que no parece tener fin; y es cuando noto unas manos alrededor de mi cuello...
Despierto en mi habitación y ahí está el montón de ropa. Alargo la mano para encender la lámpara y no se enciende. El montón de ropa vuelve a ser la jóven de pelo oscuro y ahora me está mirando. Su piel no para de brillar y veo como su cara empieza a cambiar; es como arcilla derretida; histérico me levanto de la cama para encender la luz del cuarto pero tampoco se enciende. La jóven me agarra del cuello, pero yo me revuelvo y consigo abrir la puerta; pero al final del pasillo está esperándome y esta vez me agarra del cuello y no me puedo librar...
Entonces me despierto...
1 comentario:
que sueño horriblee..
y raro..
pero que miedo..
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